De mujeres, por mujeres


Recuento de Antologías de narradoras peruanas  
hechas por investigadoras, compiladoras o antologadoras.

Imagen: Detalles de covers 1986, 1999, 2000, 2015, 2017

Ser escritora peruana y, a su vez, crítica e investigadora de la literatura peruana, es posible; siempre y cuando no se acometa el absurdo de apropiarse del rol de juez siendo parte. Bajo ese criterio, he asumido la tarea de presentar aquí un breve recuento de 'antologías' [nota 1] de autoras peruanas, a cargo de compiladoras o investigadoras; a propósito de la publicación de un cuento mío en una reciente edición peruana. Ese ha sido, en realidad, el motivo primero que me movió a escribir esta breve nota, pues al despertarse mi curiosidad por revisar con esmero publicaciones anteriores del tipo 'selección', 'antología', 'reunión' de escritoras peruanas, me di con la curiosa sorpresa de la falta de algún resumen histórico-literario, conciso, breve y asequible, que se limitara siquiera a enumerar las antologías, de y por mujeres, publicadas en el Perú.
     Así, pues, empezaré mencionando que la primera antología de cuentos peruanos, hecha por una mujer y que reunía exclusivamente a autoras peruanas, fue Cuentos (Lima: Tierra Nueva, 1959; 89 págs). Su antologadora, la poeta y dramaturga peruana Sarina Helfgott, seleccionó a nueve autoras, entre las que se encontraban algunas ya conocidas, como María Weisse, María Rosa Macedo y Magda Portal; otras más jóvenes, como Sara María Larrabure y Katia Saks; y la entonces debutante Elena Portocarrero; por otro lado, incluyó a autoras de cuento infantil, como Carlota Carvallo y Rosa María Rojas. Al parecer, un evento en el que participaban, el "Primer Festival de Escritoras Peruanas de Hoy", habría impulsado dicha conciencia de género en el campo de la literatura (Martínez Gómez 2015: 329).  A dicha antología la seguirían después otras dos más de cuentos compilados por mujeres, pero sin la exclusividad de la autoría femenina en la selección: la de Carlota Carvallo Núñez, Cuentos fantásticos, (Lima: Editorial Universo, 1969) que reunía cuentos de diversos autores de género fantástico; y la de Isabel Córdova Rosas, Antología de la Narrativa de Junín (Huancayo: Editorial San Fernando, 1974); siendo ambas compiladoras, a su vez, cuentistas.
     Décadas más tarde se publicaron dos antologías de reducido tiraje: por un lado, Cuentan las mujeres (Lima: Instituto Goethe, 1986) ---citada en algunos estudios como editada por Rocío Cisneros, y en otros, por José Adolph--- que reunió a dieciséis escritoras, entre otras: Marilyn Álvarez del Villar, Patricia Altamirano, Aida Balta, Rocío Castillo, Teresa Ruiz Rosas;  y por otro lado, ya hacia finales de siglo, aparece la publicación voluminosa Alumbramiento verbal en los 90. Escritoras peruanas: signos y pláticas (Lima: Arteidea Editores, 1999) [nota 2], editada y con prólogo de Lady Rojas-Temple, quien selecciona las obras, y entrevista y estudia no solo a narradoras, sino a poetas, como Violeta Barrientos, Esther Castañeda, Gaby Cevasco, Yelideth Chávez, Pilar Dughi, Doris Moromisato, Carmen Ollé, Rocío Silva-Santisteban y Rosina Valcárcel.
    Inaugura el nuevo milenio la investigadora italiana Giovanna Minardi, quien reunió a 39 autoras peruanas en Cuentas - Narradoras peruanas del siglo XX (Lima: Santo Oficio / Ediciones Flora Tristán, 2000) con relatos que reflejaban los más diversos temas y estilos, que la antologadora se ocupó de relacionar y revisar de manera exhaustiva y crítica en su Introducción: La narrativa femenina en el Perú del siglo XX, no sin antes desde una visión diacrónica hacer un recuento de las autoras peruanas y sus principales obras, remontándose hasta el siglo XIX; su criterio de selección para la antología fue incluir a aquellas autoras que vivían en Lima, o de la periferia pero con alcance nacional, y que hubieran publicado en el siglo XX por lo menos un volumen de cuentos; o que tuvieran algo en preparación o cuyos cuentos sueltos fueran numerosos; o que hubieran ganado premios u obtenido menciones honrosas en concursos de cuentos (Minardi 2000: 32). Así Minardi escogió a Lastenia Larriva de Llona, Amalia Puga, Angélica Palma, Delia Colmenares, Isabel Sánchez Concha, María Wiesse, Angela Ramos, Magda Portal, Isolina Soto (Sor Folie), María Martinez Pineda, Rosa Arciniega, Carlota Carvallo de Núñez, María Rosa Macedo, Catalina Podestá, Sara María Larrabure, Pilar Laña Santillana, Elena Portocarrero, Aída Balta, Leyla Bartet, Gladys Cámere, Fátima Carrasco, Gaby Cevasco, Liliana Costa, Zelideth Chávez, Patricia De Souza, Pilar Dughi, Cecilia Granadino, Fietta Jarque,  Viviana Mellet, Doris Moromisato, Carmen Ollé, Morella Petrozzi, Giovanna Pollarolo, Maria Teresa Ruiz Rosas, Carla Sagástegui, Katia Saks, Mariella Sala, Rocío Silva-Santisteban y Violeta Váscones. 
     Tendrá que pasar casi una década para que dos editoriales peruanas pequeñas se animaran a publicar antologías de narrativa de mujeres, pero sin mayores ambiciones en el campo de la crítica y la investigación literaria. Tal es así que se publican Matadoras - Nuevas narradoras peruanas (Lima: Estruendomudo, Petroperú, 2008) [nota 3], y Disidentes (Lima: Altazor, 2011) [nota 4]; ninguna de las cuales fue de edición de autoría femenina.
      Vuelven las investigadoras serias al ruedo de las antologías con Al final de la batalla - Después del conflicto, la violencia y el terror (Lima: Cocodrillo Ediciones, 2015; con prólogo de María Eugenia Ulfe), donde Ana María Vidal Carrasco, compiladora, seleccionó relatos de siete escritoras (Christiane Félip Vidal, Ysa Navarro, Karina Pacheco Medrano, Claudia Salazar Jiménez, Jennifer Thorndike, Nataly Villena y Julia Wong) siguiendo dos criterios principales, uno temático y otro de calidad, pues se trataba de dar a conocer el trabajo de memoria histórica a través de la literatura hecho por autoras que habían sufrido los años violentos del Perú de las últimas décadas del siglo XX.
     Finalmente, se ha publicado este año Como si no bastase ya ser - 15 narradoras peruanas (Lima: Peisa - Serie del Río Hablador, 2017) cuya selección estuvo a cargo de Nataly Villena Vega, autora publicada en más de una de las antologías mencionadas aquí en líneas anteriores, quien siendo a su vez investigadora da prioridad en esta publicación a la voz de las narradoras (Katya Adaui, Grecia Cáceres, María José Caro, Julia Chávez, Irma del Águila, Rossana Díaz, Yeniva Fernández, Alina Gadea, Ofelia Huamanchumo ---quien escribe este recuento---, Karina Pacheco, Claudia Salazar, Jennifer Thorndike, Claudia Ulloa y Gabriela Wiener) para que los relatos hablen por sí mismos y el breve Prólogo sea una orientación imparcial a la lectura de esa "selección polifónica" (Villena 2017: 13), como ella la ha llamado.
      Queda decir que lo presentado aquí ha pretendido ante todo informar y proporcionar datos, más que emitir juicios sobre el valor de las antologías de y por mujeres, aunque esto último me pueda haber resultado inevitable. Esa es también la causa por la que no he mencionado, de forma referencial o contrastiva, a más publicaciones de reuniones de autoras a cargo de algún compilador, por haberse tratado, tal vez, de una difusión colectiva de lo que simplemente hay en la viña de las editoriales peruanas: tanto malas como buenas narradoras.

Referencias:
Martínez Gómez, Juana (2015) "El cuento peruano del siglo XX en perspectiva", Inti: Revista de Literatura Hispánica, Vol. 1, Nr. 81-82, 319-344.
Minardi, Giovanna (2000) "Introducción: La narrativa femenina en el Perú del siglo XX"; en: Cuentas - Narradoras peruanas del siglo XX (Lima: Santo Oficio / Ediciones Flora Tristán, 2000), 13-35.
Sotomayor, Carlos M. (2011) "Entrevista a Gabriel Ruiz Ortega". [https://carlosmsotoma yor.lamula.pe/2011/07/26].
Villena Vega, Nataly (2017) "Prólogo"; en: Como si no bastase ya ser - 15 narradoras peruanas (Lima: Peisa - Serie del Río Hablador, 2017), 9-13.



[1] Término que puede referirse en un sentido amplio a una 'selección', compilación', 'acopio', 'reunión' de obras literarias escogidas bajo un determinado criterio.
[2] En 2014 el libro fue publicado en segunda edición (Montreal: Editions Alondras, 314 págs.).
[3] En esta publicación no se resalta la autoría de la edición, aunque se sabe que la empresa funcionaba bajo la dirección de un editor: Álvaro Lasso.  Así, fueron publicadas trece autoras: Katya Adaui, Monserrat Álvarez, Mónica Beleván,  Alicia Bisso, Grecia Cáceres, María Luisa del Río, Rossana Díaz, Alina Gadea, Giselle Klatic, Susanne Noltenius, Karina Pacheco, Claudia Ulloa y Nataly Villena, quienes daban la razón al adjetivo 'nuevas' del título del libro, pues ninguna de ellas había aparecido antes, por lo menos no en antología alguna de mujeres, siendo dos de ellas incluso inéditas.
[4] Gabriel Ruiz Ortega, compilador por encargo de la editorial, seleccionó a quince escritoras bajo el criterio de "me interesa más la calidad que la inclusión" (Sotomayor 2011), volviendo a convocar a algunas de las anteriores y aportando novedades: Katya Adaui, Julie de Trazegnies, Alessia Di Paolo, Rossana Díaz, Alina Gadea, Yeniva Fernández, Bethsabé Huamán, Patricia Miró Quesada, Susanne Noltenius, Karina Pacheco, Nastia T., Jennifer Thorndike, Nataly Villena y Julia Wong.